martes, 4 de diciembre de 2012

ADULTERIO , MUCHOS DATOS DE INTERES PARA SABER.



ADULTERIO , MUCHOS DATOS DE INTERES PARA SABER.



Este articulo es el resultado de búsquedas sobre este tema en muchos lugares sobre este particular, creo que lo mas importante es la reflexión en el tema y cada cual que haga sus propias conclusiones, ojala les guste y ayude.


Desde la antigüedad el adulterio se ha considerado una conducta deleznable e inaceptable para la vida en sociedad e incluso es condenada para la mas alta deidad de nuestra raza humana, el mismo ser supremo llamado Dios, Jehová o Yahvé según la idiosincrasia y credo de cada uno de los seres que habitan en este planeta y que tienen por fe el cristianismo, Él ha condicionado esta conducta estipulándola en uno de los primeros códigos que regularon la conducta del hombre en sociedad, la Biblia, precisamente en los diez mandamientos dictándolo por su propia voz a Moisés en el Monte Sinaí.

En este documento Él dejó asentado en el libro del Éxodo capitulo veinte versículo catorce, que a la letra dice: "No cometerás adulterio", dejando en claro que esta conducta es intolerable para Él, recalcándolo en el versículo diecisiete que reza: "…no codiciaras la mujer de tu prójimo….", asentando que tal vez como lo vemos en nuestra época son los congéneres del sexo masculino quienes cometen esta falta mas frecuentemente, aunque no siempre suele ser de esa manera ya que también las mujeres caen en esta conducta aunque en menos ocasiones.

La forma en que se castigaba era de una manera tal que pondría a pensar dos veces a alguien que en estos días deseara realizar una conducta adulterina.

Los castigos y penitencias iba desde la expulsión de las comunidades hasta la pena máxima que era la de morir apedreado (o apedreada), además del escarnio publico, es en la Biblia donde podemos encontrar un relato que nos ilustra esta situación, en el cual Jesucristo es quien absuelve a una mujer de este pecado además de defenderla del la muchedumbre diciendo "…quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra…"(San Juan Cáp. 8 Ver. 2 – 11) este pasaje nos ilustra como era condenado el adulterio en esa época y la forma de ser castigado que era además un castigo aplicado por la comunidad y en público.

Jesucristo mismo trato el adulterio en sus enseñanzas afirmando que este era denigrante y que el divorcio era aceptable para Él, en muchas ocasiones citó que si un hombre repudiaba a su mujer por causa de adulterio debería de darle carta de divorcio, además de entregarla a los jueces y sacerdotes para que ellos determinaran la forma en que debería ser castigada.

Estos antecedentes son los que, debido a la conquista de los españoles y la imposición de sus creencias englobadas en el catolicismo se conocen como normas de conducta que nosotros seguimos por costumbre.

Dentro de este ámbito podríamos enunciar los antecedentes de infancia del sujeto adulterino, ya que con frecuencia hemos escuchado que "los niños aprenden y repiten lo que observan en casa", también es conocida la teoría de la predisposición genética que dice que un hijo hereda genéticamente las actitudes, comportamientos, forma de hablar, caminar y hasta de reaccionar de alguno de sus progenitores.

Si bien esto es cierto en algunos aspectos por otro lado podríamos atribuir este comportamiento (adulterio) al medio en que el individuo ha sido criado, la gente que lo rodea ya sean amistades familia o parientes, esto en realmente influye en la personalidad de él, estudios realizados en distintas universidades de los Estados Unidos de América han descubierto que los patrones de comportamiento de los padres son los que mas tienen que ver con el comportamiento de sus hijos; por ejemplo cuando una madre dice a su hijo que no termina la comida de su plato que piense que hay en el mundo muchos niños que se quedan sin comer, o que lo hace comer sin estar este hambriento va produciendo en el una idea de acabar con todo lo que se encuentre en la mesa o de comer por impulso, por otro lado las adulaciones constantes de un progenitor hacia su vástago producen en el no un complejo sino un delirio de superioridad y grandeza, estos dos tipos de comportamiento ya sea de complejo o no los llevara el infante durante toda su vida, esto se llama retroalimentación que es la inducción de ideas encaminadas a provocar un tipo de comportamiento y puede ser intencional o inconscientemente.

Hoy en día hay una epidemia de adulterios en nuestra sociedad contemporánea. Las causas más comunes son:

La Inconformidad. Cuando alguno de los miembros del matrimonio se siente inconforme y no sabe expresarlo, eso puede conducir a un enfriamiento paulatino de la relación que abre la posibilidad de que otra persona intervenga y comience a suplir esa necesidad. Si no se sabe controlar la situación, la posibilidad de adulterio es muy alta.

La rutina es una actitud de desgano que ignora la necesidad de mantener viva la relación con acciones pro-activas para el matrimonio. Es lamentablemente muy fácil caer en la rutina por causa del excesivo trabajo, de las múltiples obligaciones y el no saber cómo organizar bien el tiempo. La rutina enfría el amor y abre espacio para una relación de adulterio.

La intolerancia es una actitud que definitivamente va destruyendo una relación. Cuando uno de los cónyuges mantiene una actitud intolerante de manera muy frecuente, va minando las energías de su pareja y esta generalmente opta por quedarse callado(a) y se separa emocionalmente. Si conoce a alguien que le trata con amabilidad y cortesía, es muy probable que se sienta atraído(a) a esa persona.

El egoísmo y el orgullo son también actitudes que lesionan fuertemente las relaciones. Si uno de los miembros o los dos, tienden a pensar más en sus necesidades y gustos sin tomar en cuenta las del cónyuge. Estas actitudes generan discusiones y frecuentemente ofensas mutuas que lastiman mucho las relaciones. Si aparece otra persona con un trato diferente, entonces la posibilidad de adulterio se asoma.

La debilidad espiritual de las personas hace que no tengan la fuerza para evitar las tentaciones del adulterio y entonces se dejan llevar por la emoción del buen trato y la amabilidad de otra persona, al punto que les hace pensar que con esa persona si podrían llevarse mucho mejor que con su pareja. En realidad en la mayoría de los casos no sucede eso, pero en el proceso, se destruyen una o varias familias.

Como conclusión me gustaría solo opinar que no importa cuanto se legisle sobre el adulterio como causal de divorcio, ni cuanto se legisle sobre adulterio como delito o sobre el adulterio o el divorcio en si, sino que como seres humanos debemos ver nuestras limitaciones y nuestras virtudes y que debemos pensar que si hay un ser supremo que nos ha concedido el honor de tener una persona especial para compartir nuestras vidas y que como se establece legalmente, perpetuar la especie debemos cuidar ese núcleo, esa célula que las leyes tanto divinas como terrenales protegen: LA FAMILIA, debemos hacer conciencia de lo que somos para nuestros hijos y de lo que ellos pueden llegar a ser para la humanidad, como seres con capacidad de raciocinio debemos hacer que nuestros hechos y actos sean los que los forjen como los hombres y mujeres que llevaran a nuestras naciones  por el camino al progreso y la excelencia personal y que harán de ellos buenos  seres humanos.